En Italia se venden 2,6 millones de toneladas de carne y los consumidores llevan a la mesa unos 76 kg de carne al año. La industria cárnica plantea grandes exigencias de higiene en todas las fases del proceso industrial, empezando por la cría. Es imprescindible que las herramientas en contacto con el pienso sean adecuadas para el procesado de alimentos. Y al igual como en la producción de cervezaen la producción de carne, es esencial que los indicadores de nivel cuenten con la certificación MOCA y sean adecuados para la detección de sólidos como la harina y el grano.
La transformación de la carne comienza con la cría de los animales, con métodos intensivos o extensivos elegidos en función de las especies criadas, los recursos económicos y el espacio disponible en el territorio.
Una fase concomitante de la cría es la alimentación de los animales con piensos almacenados en silos y controlados periódicamente. Las sustancias administradas pueden permanecer en la carne y, si son nocivas, suponer un riesgo para el consumidor. Por lo tanto, es esencial que todas las partes del proceso que entran en contacto con los piensos sean también aptas para el contacto con los alimentos.
CAMLogic ofrece varios instrumentos con certificación MOCA para estas aplicaciones, como los indicadores de nivel rotativos PFG05, PFG57 e PFG09así como el sensor capacitivo PFG06todos ellos adecuados para la detección de sólidos como harina y grano. Los piensos seleccionados permiten que el ganado alcance el peso adecuado y esté listo para el sacrificio, que suele realizarse en instalaciones especiales bajo el control de personal veterinario que comprueba la salud de los animales.
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Una vez completada esta etapa, la carne llega a un distribuidor o a una sala de despiece donde se porciona. Los cortes de carne resultantes pasan a la última fase, denominada "transformación", donde pueden tomar dos caminos diferentes:
Durante las distintas etapas de la transformación de la carne se producen residuos que, a su vez, se reincorporan al proceso de producción. En algunos casos se utilizan para producir harinas animales, en otros siguen un proceso paralelo consistente en tanques de almacenamiento, digestores y tolvas para utilizar los residuos como materia prima para la producción de biometano y biogás.
Una vez más, el proceso puede automatizarse mediante la instalación de indicadores de nivel de líquido CAMLogic, como el flotador CLR20fabricado con todas las piezas de contacto en acero inoxidable AISI 316 y aplicable en contacto con todos los líquidos, incluso con pH < 4,5 y espumosos.
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